La comisión electoral del Partido informó los resultados oficiales en conferencia de prensa

Primarias del PSUV: Claves e interpretaciones del proceso

El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) realizó el pasado domingo sus elecciones primarias abiertas, elecciones desde la base a cargos para gobernaciones y alcaldías en todo el país, con miras a las elecciones de noviembre de este año.

Contexto: El cuadro interno en la política venezolana tiene al partido oficialista ganando terreno en la organización y cohesión política de cara a las “megaelecciones” regionales y municipales previstas este año.

Acorde a cifras del PSUV, unos 5 millones de votantes habrían acudido a las urnas, pero por limitaciones técnicas solo unos 3 millones 500 mil habrían votado. La cifra sigue siendo muy relevante para el tipo de elección y parece que la participación habría sobrepasado las estimaciones iniciales.

El contexto de la elección es mucho más significativo. El PSUV, el partido político con más inscritos en latinoamérica, convocó elecciones desde la base y ha aplicado un método en el que, además de obtener mayoría de votos, hay condiciones que prelan la adjudicación de la candidatura, a saber, que un precandidato deba superar con 10% en diferencia de votos a su más cercano rival y alcanzar un 40% de los votos son requisitos para ganar, pero de no cumplirse, aun teniendo mayoría de votos un candidato podría no ser adjudicado. Por lo tanto, los nombramientos van a estudio, revisión y consulta.

Es evidente que el método de las primarias del PSUV trata de elevar el nivel de eficacia electoral, imponiendo como criterio que los abanderados sean los más elegibles, pues la estimación es que varios partidos de la oposición abstencionista puedan volver al ruedo electoral en noviembre y el PSUV debe formular candidaturas competitivas.

El cuadro político es más amplio entendiendo que se han anunciado los preparativos para otra ronda de diálogos entre el chavismo y las oposiciones en agosto, en México. Según el Presidente Nicolás Maduro, hay un documento redactado con miras a un posible acuerdo y se estima que parte del tramo electoral a seguir permanezca sin mayores alteraciones. Es lo previsto hasta ahora.

El chavismo ha propuesto que se reconozca la realidad objetiva de la política nacional, con la existencia de varias oposiciones políticas y estas se perfilan a negociar y algunas de ellas a ir a elecciones en el corto plazo.

Las oposiciones lidian con una gran atomización política y electoral. Algunos partidos del llamado G4 podrían ir unidos, mientras que una gran coalición de pequeños partidos de la derecha, 20 organizaciones, ya se han unido en la llamada “Alianza Democrática”.

Por qué es importante: Las elecciones de base del PSUV tienen un impacto más allá de las filas del partido oficialista, es decir, exponen la situación general a la que va la política venezolana, con un relanzamiento de la diatriba electoral, o al menos será así si los antichavistas abstencionistas vuelven al ruedo.

Se espera que la renovación de cargos en los ejecutivos y legislativos regionales y municipales genere cambios de situación en las instancias inferiores de la política constituida y ello sea rasgo de superación de toda anemia política interna. En otras palabras, la política venezolana seguirá en su ritmo vital.

Por otro lado, las internas del chavismo ocurren en un contexto en el que Venezuela progresivamente es cada vez más espacio de avances, optimismo y recuperación en las formas de normalidad política. El diálogo por venir en México será prueba definitiva de que el desmantelamiento del chavismo por vías de fuerza, coacción y bloqueo no ha sido posible, y que la institucionalidad venezolana ha resistido y derrotado estas afrentas.

Con semejante posición de fuerza política, el chavismo sigue apostando a su base y reafirmando vínculos con ella, fortaleciendo su tejido político en la sana diatriba interna y apostando a la agitación, la organización y cohesión como forma de hacer política.

ASOCIADO