El combate de la pandemia en Venezuela tiene nuevas coyunturas y aristas, y el acceso a vacunas persiste como un nudo crítico clave.
Contexto: El presidente Nicolás Maduro ha señalado que hay registros de las cepas sudafricana y californiana en Colombia. Frente al anuncio unilateral de una apertura de la frontera por parte de Colombia, el gobierno venezolano ha llamado a una interlocución mínima para efectuar una apertura acordada y planificada, coherente con el manejo de la crisis sanitaria.
El presidente indicó la posibilidad de que una apertura unilateral y desordenada pueda generar nuevos riesgos en Venezuela por la pandemia.
El desconocimiento del gobierno de Iván Duque a las autoridades legítimas del país ha significado la destrucción de las relaciones binacionales y el cese de las idóneas colaboraciones intergubernamentales, especialmente en el marco del nudo crítico sanitario por la pandemia.
El mandatario venezolano llamó a las autoridades del país a tomar posición de alerta en la frontera, con especial énfasis en el estado Táchira.
Adicionalmente, el país lidia con un proceso de vacunación a ritmo lento, aunque este domingo el mandatario anunció la llegada de 1 millón 300 mil dosis vacunales desde China.
Datos: Las autoridades sanitarias venezolanas informaron que el país ha acumulado más de 224 mil contagios oficiales, aunque el 93% no están activos al día de hoy. Igualmente se han registrado más de 2 mil 500 decesos.
El presidente Maduro indicó que con las nuevas dosis “a partir de los próximos días iniciará una nueva fase de inmunización de la población venezolana y en los meses de junio, julio y agosto avanzaremos en el Plan de Vacunación de una manera definitiva”, precisó.
Señaló que la meta es vacunar el 70% de la población venezolana para agosto y al final de año completar el 100%.
El ministro de Salud, Carlos Alvarado, detalló que hasta ahora el 90% de los trabajadores del sector salud ya han sido vacunados, mientras que se está inmunizando a las personas adultas mayores de 60 años con dos o más enfermedades.
Sin embargo, para las precisiones sobre el alcance y ritmo en la política de vacunación en Venezuela, serán determinantes los avances concretos del mecanismo COVAX del sistema de Naciones Unidas en el país. Esto dependerá de las vacunas disponibles al momento de la asignación a Venezuela.
Las vacunas que requieran dos dosis tendrán un alcance menor entre la población venezolana y, acorde a los pagos efectuados del país, se podría inmunizar con ello a un 20% de la población. Mientras que si llegan al país las vacunas Sputnik Light o la vacuna de Johnson & Johnson, que son de una sola dosis, el alcance sería evidentemente superior.
Adicionalmente, Venezuela espera por la certificación de la vacuna cubana Abdala, ya en el término de su Fase III de pruebas, para que esta sea seguidamente fabricada en Venezuela, lo cual podría consolidar la vacunación y hacer posible el cumplimiento de metas.
Por qué es importante: En su alocución el presidente venezolano indicó que los procesos de vacunación no serán coyunturales y agregó que incluso para el año próximo la población podría ser vacunada nuevamente. Esto se explica por la protección de tiempo limitado de la primera generación de vacunas que se han desarrollado y por el cuadro de incertidumbre sobre la persistencia del virus al mediano plazo.
Aunque varios países influyentes, desde EEUU, la UE, Rusia y China, han fijado posición a favor de la liberación de patentes de vacunas para acelerar los procesos, en los hechos esto no se ha consolidado. El ciclo expansivo de ganancias de las grandes farmacéuticas continúa acentuándose, mientras que la inequidad en el acceso a vacunas sigue siendo un grave problema para los países en vías de desarrollo.
