Muchas gracias, hermano Canciller, a los miembros del Instituto Robinson, hermano Fernando, hermano Rafael, a todas y a todos. Primero agradecer por la invitación a participar en las elecciones del día de ayer, ustedes saben que la prensa internacional comenta que hay dictadura, que hay violencia, pero ayer hemos sido testigos de que acá no hay violencia, aquí hay paz, tranquilidad y ayer una gran fiesta democrática. Quiero felicitar a todas y a todos los venezolanos por su participación en estas elecciones para renovar la Asamblea Nacional.
Gracias también por la invitación a participar en esta charla sobre diálogo de civilización. Yo me acuerdo que de niño escuchaba el término de civilización con motivo de recordar lo que a veces decían era el encuentro de dos mundos, que un 12 de octubre de 1492 llegan los europeos a nuestro continente llamado Abya Yala y los profesores decían que el 12 de octubre de 1492 llegó la civilización. Va pasando el tiempo, me di cuenta que no había llegado, nos dimos cuenta desde el movimiento campesino, indígena, originario, que no había llegado, no había llegado la civilización, sino una invasión, una intervención para una dominación de nuestro continente.
Y algunos debates que teníamos con los dirigentes del movimiento campesino originario, miembros de este sector y algunos viejos dirigentes, nos decían en el debate: “Jóvenes que el 12 de octubre de 1492 no llegó la civilización, nos dice que llegó la civilización de Europa, a mí me han sorprendido esos términos y en algunos casos parece la verdad. Las pandemias, distintas pandemias, virus, ¿de dónde llegan? Llegan del Occidente y desde la pandemia llega la vacuna o la cura, parece un negocio, claro, porque para que el capitalismo la vida es una mercancía. Mientras que para los pueblos la vida es algo sagrado, la salud es un derecho humano y no un negocio privado, ahí tenemos una profunda diferencia con algunas políticas del Occidente. Ahora mismo estamos esperando las vacunas que llegan de Europa para combatir el tema de vuestra enfermedad, vuestra pandemia de coronavirus.
Pero también, solamente viendo este tema de la pandemia en los países socialistas como en Cuba o Venezuela, con menos contagiados y menos muertos que algunas potencias como Estados Unidos, otra vez nos preguntamos los países socialistas, los gobiernos socialistas, valoran la vida porque luchamos por la vida, trabajamos por la vida y ahí están los resultados que sabemos, hermanas y hermanos venezolanos, los resultados que tenemos, mientras Estados Unidos tiene la mayor cantidad de contagiados de todo el mundo, con más muertos, inclusive, con más muertos por día de todo el mundo. Para el capitalismo eso debe ser parte de la civilización, pues primero es la plata y no la vida, mientras para la gente que luchamos por la igualdad, por los derechos colectivos, primero es la vida y no la plata, es nuestra profunda diferencia que tenemos.
Si hablamos de civilizaciones, yo siento que hay dos formas de civilización, la civilización del imperio y la de los pueblos. Los imperios, el capitalismo, ¿su plan cuál? es: intervenciones. ¿Con sus intervenciones qué nos traen? individualismo, egoísmo, consumismo y, sobre todo, con sus intervenciones de carácter militar o con golpe de Estado, buscan adueñarse de nuestros recursos naturales. Esa es la civilización del capitalismo y del imperialismo. Y para dominarnos ¿qué hacen? dividirnos, en algún momento me han informado que algunos documentos del Fondo Monetario Internacional que dicen “que mejor los pueblos sean más ignorantes y más pobres, cuanto más ignorantes y más pobres es sencillo dividirlos, y ¿para qué dividirnos? dividirnos para dominarnos y ¿para qué dominamos? para saquear o adueñarse de nuestros recursos naturales, es la historia de la humanidad.
Entonces ahí estamos otra vez enfrentados con el sistema capitalista quienes venimos de los pueblos luchando por la gente más humilde. Pues ¿cuál es nuestra responsabilidad?, ¿cómo debemos unirnos? quien tiene un poquito de experiencia en este tema sabe que lo más difícil de unir a los pueblos es conocer o identificar a los enemigos internos y externos. Si hablamos del momento indígena, ya identificaron los enemigos internos y externos, y por eso la lucha contra el colonialismo interno, inclusive para la fundación de las repúblicas hace 200 años.
Desde el momento que lucharon por la fundación me volví guerrillero de la independencia. No podemos, por ejemplo, olvidar a Simón Bolívar, el gran Libertador, las cinco naciones. Es una herencia que nos deja, un legado que nos deja, esa lucha por la independencia, por la soberanía. Pero también somos tan diversos. Yo sigo entendiendo que la diversidad cultural, por ejemplo, en Bolivia, es nuestra riqueza, nuestra identidad, nuestra dignidad y por eso viene también el Estado Plurinacional, para reconocemos todos.
Yo solo quiero comentarles que cuando nos planteamos hace, bueno, 20, 25 años atrás, un grupo de jóvenes realmente campesino-indígena-originario, dijimos: ¿hasta cuándo desde arriba y afuera nos van a gobernar?, ¿hasta cuándo desde arriba y afuera van a llegar políticas de planes económicos o programas sociales? Y para que nos gobernemos nosotros mismos era importante impulsar un movimiento político, pero también nos preguntamos: ¿nos llamaríamos originarios de esta noble tierra? Otra vez nos preguntamos: ¿los que llegaron hace más de 500 años atrás, esos hijos que nacieron acá, también son originarios?
Algunos llegaron por las guerras mundiales, Primera o Segunda Guerra Mundial, o europeos o de otras partes, aquí nacieron sus hijos también, son originarios y empezamos a diferenciar dos cosas. A nosotros como aymaras somos originarios-milenarios, otros son los originarios-contemporáneos y todos tenemos los mismos derechos, entonces hay como que juntarnos y ahí viene este llamado Estado Plurinacional. Y si revisamos esta corta historia en la práctica, los presidentes representamos una Sudamérica o América plurinacional, un cura, perdón un obispo, un obispo-presidente o economista-presidente, un militar como el presidente Hugo Chávez, un indio-presidente obrero como Lula, presidente esa es la expresión de América Plurinacional, todos unidos, blancos, morenos, negros, ¿cómo impulsar entonces esta América Plurinacional otra vez? Yo digo que la mejor forma es combatir el racismo, la discriminación o la desigualdad es con una América Plurinacional para que ahí todos tengamos los mismos derechos, los mismos deberes, esa es otra de las responsabilidades que siento que tenemos.
Yo solo quiero comentarles, hermanas y hermanos, que a veces es tan importante la unidad, porque el capitalismo como parte de su cultura, una cultura expresionista, una cultura de saqueo de otros recursos naturales, para superar su civilización finalmente debemos estar unidos. Si no hay unidad se hace imposible de enfrentarlos. Intentarán, no momentáneamente como dicen en Bolivia, quitarnos el poder, pero con violencia, con tanto racismo. Inclusive yo no podía entender cómo usar la biblia. Yo soy católico porque mi madre me enseñó desde niño a rezar, a orar, recuerdo que siempre me decía “hay que rezar con los ojos cerrados”; les cuento mi recuerdo, cuando fui presidente, no sé si Juan Ramón se acuerda, fuimos a una misa intercultural, llegó un momento para rezar con mi madre y el señor, rezar con los ojos cerrados, en ese momento cerré los ojos, y más tarde veo en el canal de televisión: “El presidente se durmió en la misa”. ¿Cómo rezar mirando a la televisión para que no digan que me quedé dormido en la misa? Semejante campaña que nos hacen a partir de pequeñas cosas.
Entonces, hermanas y hermanos, en esta lucha por la libertad, por la dignidad, por nuestra identidad, esa unidad, ¿pero unidad en torno a qué? ya que hay dos otra vez, el capitalismo, el imperialismo, sus políticas, su civilización, se hablaba de la civilización del saqueo. Los pueblos luchamos por la recuperación, por la nacionalización de nuestros recursos naturales y a nosotros de verdad nos ha ido bastante bien con las nacionalizaciones, por eso hemos empezado a cambiar Bolivia.
Un solo dato, casi en 20 años de neoliberalismo la renta petrolera apenas era de 3 mil millones de dólares; en 13 años, el año pasado, el 22 de enero, el Día del Estado Plurinacional de Bolivia, dejamos al país con 38 mil millones de dólares de renta petrolera y eso nos dio para atender las demandas que tiene el pueblo boliviano. Ya que estamos enfrentados como dos civilizaciones, una que defiende sus recursos naturales, su bienestar, su soberanía, y la otra la invasión y el saqueo, cuando viene el golpe no solamente es del gringo al indio, el golpe también es contra nuestro modelo económico. Con nuestro modelo económico hemos demostrado, el hermano Rafael (Correa) me puede corregir si estoy equivocado, que otra Bolivia es posible. Con crecimiento económico, con la reducción de la pobreza, con la reducción de las desigualdades, con dignidad. Ese no se nos perdonó, es nuestro delito haber nacionalizado nada más los llamados indios.
Porque quiero que sepan, hermanas y hermanos, este movimiento político nace de sectores más vilipendiados en la historia de Bolivia, inclusive durante la colonia amenazados al exterminio. Gracias a nuestros antepasados como Túpac Katari y Bartolina Sisa y tantos líderes indígenas que resistieron, aunque con descuartizamientos, pero igual, y un día nos preguntamos si siempre nuestra lucha era nacionalizar los recursos naturales y con el poder sindical, con el poder comunal no podíamos nacionalizar, el pueblo siempre tenía el poder, ¿qué hicimos? Gestar este movimiento político.
Dice el movimiento campesino-indígena-originario los primeros años, del 95-97, algunos hermanos del campo ni siquiera querían que participaran los profesionales y ahora decía nosotros hemos sido sometidos al racismo, a la discriminación, pero tampoco podemos ser racistas ni discriminar, tenemos que juntar nuestra batalla, otro debate y cuando nos juntamos vimos los últimos resultados. Y cuando pasamos después de nacionalizar a industrializar, especialmente al litio, ahí viene otra vez. Cómo los sudamericanos o latinoamericanos podemos dar el valor agregado a nuestros recursos naturales, sería largo comentarles con el tema del litio le pedí, aún recuerdo no sé si era el 2010, invitaron a Corea del Sur y viajamos para firmar acuerdos bilaterales, a veces de inversión. Me invitaron a ver una linda planta de baterías de litio y le pregunto con el de dólares, nuestras reservas internacionales ya estaban creciendo porque cuando llegamos al gobierno teníamos mil 700 millones de reservas internacionales y en 2014-2015 teníamos 15 mil millones de dólares de reservas internacionales.
Compañero Rafael (Correa), usted que veía un poco de debilidad decía, Evo está ahora en el Fondo Monetario Internacional, usted decía algo parecido. Claro, han crecido nuestras reservas, como estaban creciendo nuestras reservas internacionales yo decía a los coreanos: queremos hacer esa industria del litio su gemela en Bolivia, yo garantizo los 300 millones de dólares, igualmente hablamos con Japón, Alemania, Europa, finalmente ellos dicen no, no, no. No quieren una transferencia en ciencia-tecnología y ahí me di cuenta que ellos solo nos quieren para que nosotros garanticemos la materia prima y no nos permiten que nosotros podamos dar el valor agregado a nuestros recursos naturales, es un tema pendiente que tenemos como sudamericanos, como latinoamericanos.
Y ahí con el compañero Álvaro (García Linera) como gobierno hemos empezado a industrializar el litio, desde el laboratorio pasando por la planta piloto, el año antepasado entregamos una industria de cloruro de potasio; para este año estaba previsto inaugurar la primera industria de carbonato de litio. Tenía propuesto industrializar, por lo menos obtener 41 industrias, la mayoría para litio, hidróxido de litio, carbonato de litio, 3 plantas, 3 industrias, material de litio, otros para sus productos, pero también para insumos y ahí viene el golpe de Estado. El golpe de Estado fundamentalmente ha sido por el litio, así como reconocen algunos senadores republicanos. El dueño de Tesla hasta públicamente lo reconoce. Saben ustedes, hermanas y hermanos, y otra vez los llamados indios con apoyo, con la participación de otros profesionales, la clase media, impulsamos este proceso y viene el golpe de Estado sobre nuestros recursos naturales.
Pero también en esa unidad, esto que decía, que es tan importante identificar a nuestros enemigos internos y externos, mucha conciencia en mis hermanos, un grupo en el sector de los trabajadores realmente campesinos-obreros, la base central y a ver cómo recupera la democracia. Yo mismo me sorprendí, aunque sentía en junio-julio que iba a ganar como más del 50% las elecciones y se dice que ganamos el 18 de octubre con 55% es la mejor, la mejor prueba de que no hubo fraude, qué fraude si hubo golpe. A veces digo con mucho sacrificio, pero también algo aprendí del compañero Hugo Chávez, que me decía una vez: “Evo, a veces nos provocan, no hay que entrar en la provocación”, me acuerdo siempre, tanto hablamos con el Comandante Hugo Chávez y sentí que nos estaban provocando, y a veces nosotros con paciencia aguantando y a veces también los compañeros dicen que nos estamos rindiendo. Sabe el compañero Andrónico que no todos somos iguales, pero cuando nos damos cuenta perfectamente de qué estaba pasando, es posible explicar a los compañeros de base; entiendan bien, estamos equivocados, acá se trata de cómo recuperar la democracia. Recuperar la patria, pero no con violencia, no con muertos, no con heridos, no con persecución política y de verdad sorprende mis hermanos y hermanas de Bolivia cómo hubo mucha paciencia, pero también cómo con conciencia el 18 de octubre recuperamos la democracia con la patria y continúa nuestro proceso también.
Esa es la otra, es la otra civilización, la lucha de los pueblos. Pero es importante que haya paz con justicia social. Una vez conversamos con (Juan) Ramón Quintana, si hubiera paz con justicia social no hubiera capitalismo. Cómo llegar entonces que considere esa paz con justicia social, con igualdad, esa es la lucha dura que tenemos todavía esta generación y las nuevas generaciones. Nuevamente hermanas y hermanos saludar esta conferencia. Felicito a este Instituto Robinson por impulsar debates permanentes. Esperamos compartir también con Bolivia de esta manera, debatiendo cómo recuperar nuestra diversidad, nuestra identidad, luchamos por nuestra unidad.
Muchas gracias.
